Articulaciones e Implante de Cartílago ¿Para cuáles está indicada?
Cuando un paciente conoce la técnica de Implante de Cartílago (ICC) habitualmente surge la duda de si este tratamiento servirá para su dolencia de cartílago. Sin embargo, como ya hemos señalado en nuestro blog, esta técnica no está indicada para todo tipo de cartílagos ni para todo tipo de articulaciones.
El implante de condrocitos autólogos (ICC) es una técnica que se utiliza para reparar lesiones de cartílago hialino, únicamente de las articulaciones de carga (rodilla, tobillo y cadera). Así mismo, el implante de cartílago (ICC) no funciona en todos los tipos de lesiones ya que debe tratarse de lesiones circunscritas y no de tipo difuso (cuando el daño ha evolucionado a artrosis, entonces no se puede aplicar esta técnica).
Pero ¿Qué sabemos de las articulaciones? ¿Hay más articulaciones de carga? ¿Cómo son el resto de articulaciones? Te resolvemos estas y otras preguntas para que no te quedes con la duda.
¿Qué es una articulación?
Para comprender qué tipo de articulaciones hay, primero hay que saber qué es una articulación. Una articulación es un punto de contacto entre dos o más huesos o entre un hueso y un cartílago. Es decir, en definitiva, son puntos de unión del esqueleto que permite la movilidad y la elasticidad del cuerpo.
¿De qué está formada una articulación?
Hay varios elementos que pueden conformar una articulación:
- El cartílago:se encuentra en los extremos de los huesos y cumple el rol de conector evitando y disminuyendo el roce originado por los movimientos
- La membrana sinovial: esta membrana contiene el llamado líquido sinovial. Un líquido, como os hemos comentado en otras ocasiones, viscoso y transparente que lubrica la articulación. Sólo está presente en las articulaciones sinoviales.
- Ligamentos: son tejidos de carácter conectivo y, además, son elásticos. Protegen la articulación y limitan sus movimientos.
- Tendones: al igual que los ligamentos, son tejidos conectivos mediante los cuales se unen los músculos al hueso. Además de permitir la biomecánica muscular, en ciertas articulaciones cumplen una función estabilizadora.
- Bursas: son una especie de “bolsas” llenas de líquido que amortiguan el roce de la articulación.
- Menisco: es una almohadilla cartilaginosa que disminuye el rozamiento entre dos superficies articulares. Los más conocidos son los de la rodilla, pero también hay meniscos en la muñeca, la articulación temporomandibular, etc
¿Cuántas articulaciones hay en el cuerpo?
El cuerpo humano, tal y como lo conocemos ahora, posee 360 articulaciones. Sin embargo, no todas son del mismo tipo, cada una tiene su función y se pueden agrupar por distintas tipologías.
Las articulaciones, además, se distribuyen de la siguiente manera:
- 86 se encuentran en el cráneo
- 6 en la garganta
- 66 en el tórax
- 76 en la columna vertebral
- 32 en cada extremidad superior y 31 en cada una de las inferiores.
¿Qué tipo de articulaciones existen?
Las articulaciones se pueden dividir en según su estructura (morfológicamente) o según su función (fisiológicamente).
En cuanto a su morfología (estructura) podemos distinguir tres grandes grupos:
- Articulaciones sinoviales o móviles: dentro de este grupo además encontramos tres grandes grupos según los planos de movimiento (uniaxiales,
biaxiales o multiaxiales).
- Articulaciones fibrosas o inmóviles: Son aquellas en las que participa el tejido fibroso uniendo los huesos. La movilidad de las mismas queda definida por la longitud del tejido fibroso. En este grupo se encuentran las uniones de la pelvis y el sacro y las suturas del cráneo.
- Cartilaginosas o semimóviles: Son aquellas en las que la unión se lleva a cabo entre el cartílago y el hueso. No permiten tanto movimiento como las móviles. Son sincondrosis cuando están hechas de cartílago hialino, y sínfisis cuando son de fibrocartílago.
En cuanto a su función (fisiología y biomecánica) podemos distinguir tres grandes grupos:
- Diartrosis: Permiten una gran diversidad y amplitud de movimientos a los huesos. Poseen cartílago articular o de revestimiento en ambas partes de la articulación. Son las más móviles, pero también las más frágiles ya que son menos resistentes.
- Anfiartrosis: Se mantienen unidas por un cartílago elástico y permiten una movilidad escasa, por ejemplo, la unión de los huesos de la columna vertebral.
- Sinartrosis: Se mantienen unidas por el crecimiento del hueso o por un cartílago resistente como los huesos del cráneo o de la nariz.
¿En qué articulaciones puede aplicarse un Implante de Cartílago (ICC)?
La técnica de implante de cartílago (ICC) es muy específica para el tratamiento de lesiones circunscritas del cartílago (lesiones condrales y osteocondrales, condropatías y condromalacias focales) y de las osteocondritis disecantes, y sólo en articulaciones sinoviales de carga (tobillo, rodilla y cadera).
Esta técnica no es efectiva cuando la articulación presenta un daño difuso (artrosis), ni para tratar ciertas estructuras que no sean el cartílago hialino articular (como el lábrum o los meniscos), ni cuando ciertas estructuras articulares están seriamente dañadas (meniscos o alineación ósea) o cuando la edad del paciente supera los 60 años.